La Celebración de Simjat Torá y el Comienzo de la Creación: Una Reflexión Universal
Introducción
Boker Tov, queridos
amigos. Tras el cierre de la hermosa celebración de Simjat Torá, estuve reflexionando
sobre el profundo significado que encierra el inicio de la Bendita Torá con la
Parashá Bereshit. Este relato de la creación no solo nos invita a asombrarnos
ante la grandeza del universo y la majestad del creador, sino que también nos
recuerda el poder transformador de nuestras acciones y la importancia de dar
vida a cada nuevo comienzo. En este contexto, me gustaría compartir con ustedes
algunos de mis pensamientos y reflexiones sobre cómo el mensaje universal de
Simjat Torá puede inspirarnos a todos en nuestra búsqueda de renovación y
propósito comencemos.
Simjat Torá, conocido en
su aspecto oficial como Shminí Atzeret, representa la culminación de las
festividades judías. En este día, los judíos celebran la finalización del ciclo
anual de lectura de la Torá para luego volverse a embarcar en el estudio de sus
enseñanzas, simbolizando un vínculo indestructible entre Dios y el pueblo de
Israel. Esta festividad, sin embargo, contiene lecciones que trascienden el
ámbito judío, ofreciendo mensajes valiosos a toda la humanidad, es decir a
aquellos conocidos, como los Noájidas (toda persona no judía, aunque no sea
observante) y también aquellos que, observan los principios de la Torá.
El Origen de Simjat Torá
El nombre Simjat Torá se
traduce como "la alegría de la Torá". Aunque este término no aparece
en la Torá misma, en la tradición judía refleja la profunda conexión emocional
y espiritual que los judíos sienten hacia sus enseñanzas. La atracción hacia la
Torá es comparable a la relación que un hijo tiene con su padre; simboliza la
guía, la dirección y la fuente de significado. En este sentido, el aplazamiento
de volver a casa tras la festividad de Sucot, como lo relata un Midrash, es
visto como una súplica de Dios para permanecer cerca de Él un día más. Esta
relación íntima es la esencia de Simjat Torá.
En este día, se llevan a cabo las "Hakafot", donde los participantes danzan con los rollos de la Torá, simbolizando el compromiso de estudiar y vivir de acuerdo a sus enseñanzas. Aquí, la alegría no se encuentra en el desenfreno, sino en una celebración profunda y auténtica del vínculo con lo sagrado.
La Dimensión Espiritual de Simjat Torá
A través de Simjat Torá,
el pueblo judío reafirma su deseo de estudiar y seguir la Torá, que es vista
como esencial para su vida espiritual. Este día refleja el propósito mayor de
la existencia, recordando que vivir sin un sentido claro puede llevar a la
desdicha. La Torá es vista como una guía para vivir de manera significativa y
plena, estableciendo un propósito claro en nuestras vidas.
Un aspecto importante de
Simjat Torá es la renovación espiritual. Los judíos Comienzan nuevamente con la lectura
de Bereshit, el primer libro de la Torá. De acuerdo a Génesis 1:1, "En el
principio creó Dios los cielos y la tierra". Este verso establece no solo
el origen del mundo, sino también la relación entre el Creador y Su creación.
El relato de la
Creación y Su Sentido Universal
Al abrir la Parashá de
Bereshit, vemos cómo Dios crea el mundo en seis días, cada uno con su propio
propósito y orden. La creación de la humanidad, formada a imagen de Dios
(Génesis 1:26), resalta el valor intrínseco de cada individuo y la
responsabilidad que todos compartimos. El relato de Adam y Javá, y su
desobediencia al mandato divino de no comer del árbol del conocimiento del bien
y del mal, enseña sobre la importancia de la moralidad y la libre elección
(Génesis 2:16-17). Esta narrativa no solo refleja la historia del pueblo judío,
sino que también proporciona una inclusión universal: “todos los seres humanos sean judíos o no deben lidiar con sus propias
decisiones y las consecuencias que estas traen.”
El relato de Caín y Hevel
posterior al pecado del árbol del conocimiento: “ilustra los peligros de la ira y el odio, y cómo un ser humano puede
desviar su camino.” La historia de Noaj, quien se convierte en un faro de
justicia en un mundo corrupto, enseña que: “aun
en medio de una sociedad corrupta uno puede ser un agente de cambio y rectitud”,
una lección que resuena con el ideal que la Tora pide no solo al judío sino a
todo ser humano(Noájida) asumir el compromiso de vivir de manera ética, en
armonía con los principios universales.
La alegría de la Torah y su Mensaje para Todos
El mensaje detrás de
Simjat Torá es: “cada individuo,
independientemente de su origen, puede hallar joyas de sabiduría en las
enseñanzas de la Torá.” Los Noájidas que son todas las personas no judías, y
principalmente aquellos que buscan seguir los Siete Mandamientos de Noaj,
pueden encontrar en la alegría de Simjat Torá un llamado a fortalecer su
compromiso con estas enseñanzas, promoviendo la justicia, la ética y la unidad
entre todos los seres humanos.
La cercanía que se busca
en Simjat Torá, extendiendo la celebración más allá de la individualidad,
sugiere una unión más profunda entre todos los hombres. En este sentido podemos
decir que:
“La Torá no solo es el legado del pueblo judío, sino que
se convierte en un faro de sabiduría y moralidad para toda la humanidad.”
Conclusión
Vivir la alegría de la Torá
es una celebración de vida, un trabajo permanente de buscar el conocimiento y
la conexión con lo divino. Esto Nos recuerda que la búsqueda de significado es
un camino universal y que, mediante el estudio y la acción, todos podemos
contribuir a un mundo mejor. Así, al girar en la danza de la vida junto con la
Torá, afirmamos nuestra misión de vivir con propósito, extendiendo esa luz
hacia nuestra comunidad y el mundo entero. Al abrir la Parashá de Bereshit,
somos nuevamente invitados a la creación, resonando la lección de que cada uno
puede convertirse, como Noaj, en un campeón de la justicia y la rectitud en un
mundo que a menudo se ve cada vez más fragmentado.
Al concluir y reiniciar este recorrido por las enseñanzas de la Torá,
les invito a sumergirse en su sabiduría y a abrazar este nuevo ciclo como una
oportunidad para la elevación espiritual y moral. Al igual que Noaj, cada uno
de nosotros puede convertir su vida en un faro de justicia y bondad,
construyendo puentes en vez de muros en nuestro camino diario. Juntos,
trabajemos por un mundo mejor, donde la luz de la Torá brille en cada acción y
cada palabra, transformando nuestras comunidades y, en última instancia, el
mundo en el que vivimos. Que este sea un tiempo de conexión, aprendizaje y
crecimiento compartido. ¡Les deseo a todo un año lleno de bendiciones y significado!
Shavua Tov(buena semana)
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